Marta atram
Lifestyle

Nieve en Madrid, un día inolvidable

Este año empieza pisando fuerte. Apenas 9 días después de haber entrado en el 2021, cayó una borrasca enorme en Madrid, dejando la ciudad cubierta de blanco. Parecía un país Nórdico o Canadá y, sin embargo, era la capital de España. Ese día de nieve en Madrid, para la mayoría, fue un día mágico.

Filomena Ataca

Fueron 3 días en los cuales estuvo nevando sin parar. Algo inédito para mí. Nunca había vivido una cosa así. Nunca había vivido una nevada tan grande en la ciudad. Filomena, así se llama la borrasca, fue en efecto un fenómeno meteorológico que hacía más de 50 años que no ocurría y que dejó a su paso varias ciudades paralizadas.

Hubo mucha gente que se quedó atrapada en sus coches, camiones y/o autobuses, intentando llegar a su destino, pero Filomena los alcanzó antes. Para esas personas, no tuvo nada de mágico ni de divertido.



Nieve en Madrid

En cambio, para los que, como yo, no estuvimos atrapados, fue un día muy especial. Todo el mundo salió a la calle a pasear, a jugar con la nieve e incluso a esquiar y a hacer snow por las calles de Madrid. Las peleas de bolas de nieve con todo el mundo y los muñecos y esculturas de nieve fueron los protagonistas ese día. Todo el mundo andaba por en medio de la calle, ya que los coches no podían circular. Todas las personas con las que me crucé ese día estaban felices. Todas. Fue algo muy bonito, de verdad. Los adultos, de repente, sacaron a ese niño que todos tenemos dentro que, por más poético que suene, es verdad, se olvidaron de cualquier tipo de preocupación y se dedicaron a disfrutar y jugar con la nieve. Por la calle solo había sonrisas e incredulidad. Por un lado, todos estábamos felices pero por otro, nadie entendía nada.

Una de las cosas más vistas fue, a la gente llamando a sus familiares y amigos que no estaban para ver la nieve en Madrid y compartir esos momentos de euforia aunque fuera a través de una pantalla. Yo lo inmortalicé y grabé un vídeo, que aquí os lo dejo, para que podáis vivir o revivir ese día tan mágico, que quedará grabado en mi memoria para siempre.

 

 

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