El cheesecake me encanta, pero me es muy difícil encontrar uno que sea vegano (u ovovegetariano) y sin gluten. Solamente he encontrado una vegana y sin gluten en un restaurante vegano en Madrid y, me encantó, desde entonces, sueño con esa tarta de queso.

Sé hacer dos tipos de cheesecake vegano y sin gluten: uno al horno y otro sin horno. El que no necesita horno lo dejo para el verano, ya que va al congelador y, es muy recomendado comerlo en frío. Así que, la receta de hoy es de la tarta de queso vegana y sin gluten al horno.

La verdad es que es una receta muy sencilla, no tiene mucha complicación. Depende de dónde vivas, será más complicado encontrar los ingredientes que no el proceso de hacerla. Esta muy muy buena, además, es muy saludable y tiene un alto contenido proteico, debido al uso de anacardos. Mira que yo soy de las que piensa que, si algo no lleva chocolate, no vale la pena, y esta tarta ¡me gusta muchísimo!

Cómo preparar un cheesecake vegano y sin gluten 

Ingredientes

Para la tarta

• 1 yogur grande de soja natural, sin azúcar y sin nada (400 g)
• 200 gramos de anacardos
• 100 ml de bebida vegetal
• 60 ml de sirope de agave
• El zumo de 1 limón
• 2 Cucharadas de maicena (o harina de maíz)
• 1 Cucharada de levadura nutricional

Para la cobertura

• • 500 gramos de arándanos (pueden ser congelados o frescos)
  • 250 gramos de azúcar
  • El zumo de 1 limón

Preparación

1. Pon a remojar los anacardos durante, al menos, 1 hora.
2. Pon a precalentar el horno, ¡que ya empezamos!
3. Para empezar con la receta, después de los dos primeros pasos, tienes que escurrir los anacardos y meterlos en el vaso de la licuadora y añades la leche, el zumo de limón y medio yogur de soja (es decir, 200g) de momento.
4. Triturar hasta que quede una mezcla suavecita.
5. Añade el resto de los ingredientes (harina de maíz, levadura nutricional, sirope y lo que queda del yogur (los otros 200g) a la licuadora.
6. Triturar todo.
7. Untar un molde con aceite de coco, para evitar que se enganche el pastel al molde y que sea más fácil de desmoldar.
8. Verter la mezcla en el molde y meter en el horno a 180º y a 20-30 minutos. Mi recomendación es ponerlo primero a 20 minutos y si veis que le falta, lo ponéis 5 o 10 minutos más.
9. Una vez ya esté listo y fuera del horno, hay que dejarlo reposar 2 horas antes de comerlo, así que, mientras puedes ir preparando la mermelada de la cobertura.
10. En una olla, verter los arándanos, el azúcar y el zumo de limón. Los pones a fuego medio y los dejas hervir unos 20-30 minutos. Tienes que ir removiéndolos de vez en cuando.
11. Pasados esos 20-30 minutos, verás que los arándanos se han ido deshaciendo poco a poco. Si quieres grumos, lo único que tienes que hacer es apagar el fuego y esperar a que se enfríe un poco. Si no te gusta la mermelada con grumos, con el minipimer, tritura un poco y ¡listo!
12. Para terminar, una vez el pastel se haya enfriado, vierte la mermelada por encima y ¡a disfrutar!

¡Para mí esta receta tiene un 20/10! A ti, ¿qué te ha parecido? Si la pruebas, no olvides hacérmelo saber, ya sea dejándome un comentario en esta publicación o etiquetándome a través de mi instagram (@m.atram).

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