Cuando pienso en postres veganos me gusta que sean ligeros, pero deliciosos y que me puedan servir de postre y de snack a la vez, además también que sean saludables. O, al menos, lo más saludables posibles. Por eso quiero compartiros hoy esta tarta de coco sin horno. Está deliciosa, es muy fácil de preparar y puede servir tanto de postre como de snack. Además es saludable y no lleva azúcar refinado. ¡O sea, que es ideal!
Esta receta es similar a la tarta de queso sin horno o al lemon pie que os he compartido en este blog, si las habéis probado y luego preparáis esta, veréis las similitudes en el proceso. Con las cantidades que os doy hoy, da para una tarta grande (de 4 trozos grandes) o para 3 mini tartitas, del tamaño de las que véis en la foto. En 15 minutos tienes este pastel de coco listo, ya que no tiene mucha complicación. Lo peor, es el tiempo de espera, como siempre. Necesita reposar en el congelador unas 4 horas para hacerse bien, pero vale la pena. Para mí, es uno de mis postres veganos favoritos.
Cómo preparar una tarta de coco sin horno
Ingredientes
- 1 taza de avellanas crudas y sin freír
- 2 dátiles medjoul
- 2 cucharadas (tablespoon)de aceite de coco
- 1 lata de leche de coco
- 3 cucharadas (tablespoon) de sirope de arce
- 1 cucharada (tablespoon) de vainilla
- 1/4 de cucharadita (teaspoon) de azúcar de coco
- 1/4 de cucharadita (teaspoon) coco deshidratado
Instrucciones
Para la base
- Triturar las avellanas, los dátiles y el aceite de coco con un poco de agua.
- Una vez se ha triturado y es todo una masa homogénea, añadir a un molde y aplanar toda la masa. La idea es que quede repartido a partes iguales, sin ningún bulto ya que esto será la base de la tarta de coco. Puedes ayudarte con una espátula o con la mano para que quede planito. Una vez lo tienes listo, lo puedes dejar en la nevera o congelador mientras preparas el relleno.
Para el relleno
- Vamos a verter la leche de coco, la vainilla y el sirope en un bol y lo vamos a mezclar todo, intentando que queden los 3 ingredientes bien integrados.
- Una vez está todo bien mezclado, lo añadimos al molde, donde ya habíamos preparado la base.
- Lo guardamos en el congelador durante, mínimo, 4 horas. Así nos aseguramos que todo está listo.
Para los toppings
- Una vez lo sacamos del congelador, podemos decorarlo. Le añadiremos el azúcar de coco y los chips de coco deshidratado y ya lo tenemos. Otra opción es ponerle trozos de fruta. A mi me gusta mucho con pera, creo que le da un contraste muy interesante. No olvides sacarlo 10 minutos antes de consumirlo, así se va ablandando y atemperarlo un poco.
Si optas por hacer una tarta entera y grande y no te la terminas, puedes guardarlo de nuevo en la nevera o congelador para que te aguante.
Espero que esta receta de tarta de coco sin horno te haya gustado tanto como a mí. Si la haces y la compartes, por favor, etiquétame a mi instagram (@m.atram) o utiliza el hashtag #MartaAtram así puedo verla, ¡me encantaría!
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